La fascitis plantar consiste en un proceso degenerativo que provoca la inflamación de una banda de tejido elástico ubicada en la planta del pie, conocida también como fascia plantar. La única forma de curarla pasa por trabajar en la musculatura del pie, y eso incluye hacer una serie de estiramientos enfocados a relajar la tensión de esta banda de tejido elástico.
Estirar los dedos del pie, levantar pequeños pesos con los dedos para fortalecerlos, estirar el pie completo o utilizar una toalla para estirar el pie antes de levantarte por completo son solamente algunos de los estiramientos de fascitis plantar que puedes poner en marcha tanto para evitar su aparición como, en el caso de que ya la sufras, para mitigar sus molestos dolores.
Estos ejercicios han de ir también acompañados de reposo -sobre todo en caso de que hagas mucho deporte-, hielo en la zona afectada y, si es necesario, valora la posibilidad de utilizar plantillas para corregir tu pisada y así poner fin al problema de la fascitis. Para más información, pulsa aquí.
La fascitis plantar también se puede prevenir. Pese a que son varias las causas que pueden hacer que seas más propenso a sufrir esta molestia, factores como la obesidad, un calzado inadecuado o la falta de movilidad en los tobillos son solamente algunos de los «acelerantes» que ya está demostrado que pueden provocar la aparición de esta dolencia.
Pero si eres deportista, entonces el mejor consejo que podrás recibir es el de hacer estiramientos antes y después de practicar deporte. Es la mejor forma no solamente de evitar lesiones, sino precisamente también de sufrir fascitis plantar.
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